Historia del marketing: cómo ha evolucionado a lo largo del tiempo

La historia del marketing y su evolución a lo largo del tiempo

¡Hola amigos! Hoy quiero hablarles sobre la historia del marketing, un tema que ha sido de gran interés para mí desde hace muchos años. A lo largo de los siglos, el ser humano ha utilizado diversas técnicas para promocionar sus productos o servicios.

Durante la Edad Media, los comerciantes utilizaban señales e incluso gritos para anunciar sus mercancías en las plazas públicas. Con el paso del tiempo, esto fue evolucionando hasta llegar a la creación de periódicos y carteles publicitarios durante el Renacimiento.

Más adelante, en la Revolución Industrial, se produjo una explosión en la producción masiva de bienes y servicios que requerían ser vendidos a una sociedad cada vez más amplia. Fue entonces cuando surgió el concepto moderno de marketing: comenzaron a aparecer campañas publicitarias dirigidas específicamente al consumidor final.

En 1900 nació Theodore Levitt -un experto en economía- quien revolucionaría aún más todo lo concerniente al marketing con su libro “Marketing Myopia”. Este libro sostenía que las empresas debían enfocarse no solo en vender productos sino también crear relaciones duraderas con los clientes.

< p>A partir de allí surgieron nuevas formas de hacer marketing como por ejemplo con radio y televisión, pero es indudable que internet fue uno los mayores avances tecnológicos porque permitió conocer mucho mejor las necesidades y deseos del público objetivo mediante herramientas digitales (google adsense) .

En resumen podemos decir que hoy día tenemos una amplia variedad de técnicas para hacer marketing y publicidad. Sin embargo, a pesar de que todo ha evolucionado mucho, las bases del marketing siguen siendo las mismas: conocer al cliente y entender qué necesita.

Desde los mercados de trueque hasta la publicidad digital: una mirada al pasado

El marketing ha evolucionado a lo largo de la historia, y es que desde los primeros intercambios comerciales en las sociedades más antiguas, el ser humano ha buscado maneras de promocionar sus productos y servicios.

En civilizaciones como la egipcia o la romana ya se utilizaban inscripciones en muros para anunciar eventos importantes. En Grecia antigua se crearon tabernas con letreros para llamar la atención del público. Pero fue durante La Edad Media cuando apareció el término “mercader”, un profesional dedicado a vender bienes por cuenta ajena; estos mercaderes solían viajar entre pueblos llevando sus productos y utilizando técnicas básicas de persuasión verbal.

Con el paso del tiempo, estas prácticas fueron avanzando cada vez más. Fue en 1450 cuando Johannes Gutenberg inventó su famosa imprenta móvil, haciéndose posible imprimir grandes cantidades de folletos que contenían información sobre nuevos productos o servicios disponibles. El concepto abstracto pero muy realista de marca comenzó a surgir en esta época también.

Ya entrado el siglo XX, con la Revolución Industrial totalmente desarrollada y las empresas multiplicándose sin cesar, surgió necesidad urgente por destacarse sobre los demás competidores mediante tácticas innovadoras. Los años 20 representaron una década importante dentro del mundo empresarial porque fue allí donde comenzó a definirse tal cual lo conocemos hoy día el Marketing Mix (precio-producto-promoción-plaza).

La televisión llegaba en los años 50 y con ella un nuevo canal para las empresas. Los anuncios de televisión se convirtieron en el medio predilecto para promocionar productos, lo que llevó a la creación de agencias especializadas en publicidad.

Con la llegada del siglo XXI, toda una nueva era del marketing digital tomó lugar completamente cambiando el panorama. Las redes sociales surgieron como plataformas publicitarias y nuevas tecnologías comenzaron a ser implementadas dentro de las estrategias comerciales. Ahora hay incluso cursos especializados en cómo manejar perfiles empresariales exitosos dentro de estas plataformas digitales.

En conclusión, queda claro que desde aquellos mercados primitivos donde se intercambiaba mediante trueque hasta nuestros días, la evolución ha sido constante; pasando por los posters impresos o spots televisivos tan famosos durante décadas anteriores. Actualmente nos encontramos inmersos totalmente dentro de una época netamente digitalizada donde prima la creatividad e innovación al momento de desarrollar campañas efectivas capaces no solo capturar clientes sino además fidelizarlos.